Guerreros X Tradicion

Diego Huerta es un fotógrafo en una misión para capturar la esencia de la belleza mexicana, una población indígena a la vez. Sus fotos son realmente algo para admirar. Todo comenzó hace cuatro años cuando Diego Huerta decidió embarcarse en un viaje épico de fotografiar a todas las poblaciones indígenas de México. Hay alrededor de 60 de estas poblaciones indígenas en México y, hasta ahora, Huerta está produciendo algunas fotos increíbles. Según Mic, Huerta se inspiró en su propia curiosidad de ver qué era México antes de que los españoles conquistaran el país. “Es una forma de revivir la historia en el momento real. No en un libro ”, le dijo Huerta a Mic. "Y esa es la sensación que espero transmitir a otros, mexicanos o no, ya que las culturas nativas deberían ser parte del patrimonio mundial". El fotógrafo con sede en Austin hace más que simplemente tomar fotos de las personas en las tribus. Se sumerge por completo en el grupo.

Marti Gould Cummings is ready to serve looks while serving their city. Marti Gould Cummings is trying not to swear but just can’t help it. “When I win, it's going to be a really fucking awesome feeling,” she tells  Out . “I believe this is my calling. I believe this is what I am put on this earth to do — to not only be a drag queen who's funny, silly, and entertaining, but somebody who took that platform and used it for something bigger. I’m really nervous, scared, and excited and ready to do the work.” On Thursday, Cummings is officially throwing their hat in the ring for the New York City Council, where they hope to represent Manhattan’s District 7. Although the 51-person board currently boasts a plethora of LGBTQ+ representation, including Speaker Corey Johnson, many of those politicians are term-limited. Cummings, a longtime activist and performer in the city, said their candidacy is critical to ensure that LGBTQ+ keep their seat at the table. Cummings  has be...

Los creadores de cambio más efectivos en nuestra sociedad no están esperando que un nuevo presidente mejore sus vidas, están plantando semillas, literalmente, y a través del acto revolucionario de la jardinería, están reconstruyendo sus comunidades mientras hacen crecer sus comunidades. Independencia propia. Cada cuatro años, cuando se realizan las grandes elecciones, millones de personas ponen su pasión por crear un mundo mejor en un concurso político cada vez más corrupto y absurdo. ¿Qué pasaría si esa energía se invirtiera en algo que valiera la pena, algo que directa e inmediatamente mejorara la vida, la comunidad y el mundo en general? El simple acto de cultivar nuestros propios alimentos desafía directamente la matriz de control de muchas maneras auténticas, por lo que algunas de las personas más progresistas y de mayor voluntad están recogiendo palas y comenzando desafiantemente los jardines. Se ha convertido en una declaración política mucho más significativa que apoya...

“Déjame decirte cómo perdimos la tierra. No era nuestra tierra, como si nos perteneciera. Era la tierra donde cazábamos o donde nuestros ancestros estaban sepultados. Era la tierra que el Creador nos había dado. Era la tierra donde sucedían nuestras historias sagradas. Había lugares sagrados en ella. Nuestras ceremonias se realizaban aquí. Conocíamos a los animales. Ellos nos conocían a nosotros. Presenciamos el paso de las estaciones en esta tierra. Estaba viva, como nuestros abuelos. Éramos parte de ella. La tierra era parte de nosotros. Nosotros ni siquiera sabíamos lo que era ser propietarios de la tierra. Es como decir que eres propietario de tu abuela. Para nosotros, la tierra estaba viva. Mover una piedra significaba cambiarla. Matar a un animal era quitarle algo a ella. Tenía que haber respeto Nosotros no vimos respeto en esa gente. Ellos cortaban los árboles y dejaban a los animales en el lugar donde les disparaban. Hacían ruidos fuertes. Parecían salvajes. Su paso ...